Siete países europeos, incluido España, han acordado esta semana crear un registro judicial antiterrorista en el seno de la UE, con el objetivo de fomentar el intercambio de información tras un ataque terrorista y de mejorar sobre las pesquisas puesta en marcha por los diferentes países.
Esta decisión fue ratificada en una reunión en París el pasado lunes por los ministros de Justicia de Francia, España, Alemania, Bélgica, Italia, Luxemburgo y Holanda. Según la actual ministra francesa del ramo, Nicole Belloubet, esta iniciativa podría ser inmediatamente implementada, puesto que no exige un desarrollo normativo, pues los textos de regulación sobre la materia ya existen.
Este nuevo sistema estará gestionado por la agencia europea Eurojust y aspira a aportar mayor claridad, seguridad y rapidez a las investigaciones tras un ataque, muchos de los cuales tienen implicaciones transnacionales. Bajando al terreno, según el acuerdo alcanzado entonces, esta agencia europea deberá adoptar medidas para investigar posibles vínculos entre los casos y encargarse de informar inmediatamente a las autoridades judiciales de los Estados miembros, para que estas puedan definir mejor qué estrategia seguir en cada expediente.
Desde 2015, las autoridades judiciales de la UE han recurrido a Eurojust para coordinar y recibir ayuda en 256 investigaciones terroristas, que incluyen ataques como los de París y Saint-Denis en noviembre de 2015 o los de Barcelona y Cambrils de agosto de 2017. Pero aunque esa cooperación llevó a desarrollar equipos de investigación o estrategias conjuntas, el intercambio de datos en ese tipo de casos por el momento no es sistemático, algo con lo que acabará este futuro registro de nueva creación.